Las intenciones de la AVT

Tras el alegato del abogado de la acusación de la AVT, seguimos observando una mal sana obsesión por inducir a las dudas con respecto a la autoría de los atentados del 11-M en Madrid y seguir alentando la llamada “teoría de la conspiración”. En ella mantiene sus dudas sobre la implicación de ETA en los atentados, implicación negada por activa y por pasiva por los investigadores tanto privados como de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado a excepción de los suyos, claro esta. Para ello no ha dudado en caer en contradicciones tales como exculpar a dichos investigadores al tiempo que duda de su efectividad dejando caer la posibilidad de la existencia de manos negras que, según ellos, no han actuado de forma adecuada de manera intencionada para así no poder inculpar a ETA. Esa “mano que mece la cuna” como Emilio Murcia Quintana dice, se ha dedicado a destruir pruebas, acelerar análisis e introducir elementos falsos para construir una versión oficial falsa… Todo esto con la atenta mirada de nuestras Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado regidas y dirigidas por un gobierno del PP (en esos momentos) y por el mayor interesado en la implicación de ETA el Sr. Angel Acebes… Todo un logro. Pero mas allá, en el súmmum de la contradicción, esta asociación ha asegurado que la instrucción se ha realizado con el criterio "exclusivo y excluyente" del juez instructor y del ministerio fiscal, "sin participación de las acusaciones". Y ha asegurado que ha tenido que enterarse de detalles del proceso a través de la prensa (suponemos que de la suya… El Mundo), al mismo tiempo que al final de su alegato el abogado de la AVT ha concluido agradeciendo al magistrado Javier Gómez Bermúdez su manera de dirigir la sesiones, en las que ha sido público y notorio, el desquiciamiento al que le han hecho llegar con su obsesión de introducir a ETA en todo momento, viniese o no viniese a cuento.
En mi humilde entender, solo puedo llegar a una conclusión y es que ante la pregunta ¿Qué interés tan exacerbado puede tener la AVT en seguir con este asunto después de haberse demostrado por todos los medios posible que estos acusados actuaban como una cédula organizado dependiente única y exclusivamente de Al Qaeda? ¿Después de haberse aportado multitud de pruebas que incriminan de forma fehaciente a estos terroristas como únicos autores de la masacre? Solo tengo una respuesta… Los lazos que unen a la directiva de la AVT con los grandes mentirosos del 11 al 14 de marzo de 2004 les obliga a mantener la duda para inculcar la incertidumbre de si Acebes era un cínico mentiroso con reiteración y alevosía o solamente un mentiroso a secas. Y si sale bien, pronto les veremos por el partido.